viernes, 25 de septiembre de 2009

Desayuno con diamantes...

Realmente esta mereciendo la pena compartir esta vivencia con vosotros. Puedo sentir gracias a vuestros comentarios, que esta experiencia nos está removiendo interiormente a cada uno de nosotros (a cada uno a su manera). Os agradezco mucho ese rato que pasáis leyendo estas líneas, y os animo a todos a que pongáis en practica aquello, que durante este paréntesis de vuestra vida diaria, os sugiera el alma.

¡Por fin! Ya tenemos constructor para todos los arreglos que necesitan las escuelas. Esta semana nos hemos reunido con él y hemos visitado las 7 escuelas explicándole cada uno de los problemas que tenemos que resolver. Las remodelaciones de las primeras 7 Bholus comenzarán pronto. En cuanto a la nueva escuela que estamos diseñando vamos a dejar todos los planos hechos para que empiece la construcción en Noviembre, que es cuando el constructor estará disponible para empezar una obra nueva. Es una lástima, pues me hubiera gustado dejar una escuela construida en la que poner en practica los pequeños conceptos bioclimáticos en los que hemos trabajado. En cualquier caso estamos contentos porque las 7 anganwadis se van a quedar estupendas y los niños van a disfrutar de una escuela en condiciones. Aqui os dejo con alguna foto de nuestra última visita al slum.



...les encanta hacerse fotos...


Algunas imagenes nunca dejaran de impactarme...humanos y animales crecen juntos en el slum


Algunas sonrisas te hacen comprender porque estas aqui...


Happy birthday!!!


...a mi esta sonrisa me cautiva...

Todavía no os he hablado de Seva Café, donde sirvo como voluntario todos los miércoles. Es una especie de restaurante en el que las cartas no tienen precio. Cada uno paga lo que puede. Cada noche se le da de comer a 50 personas y los voluntarios cocinamos, lavamos los platos y servimos las mesas. La única norma es que no se puede desperdiciar la comida, así que las raciones son pequeñas y puedes ordenar todas las que quieras.

Tiene varias cosas interesantes como un caja donde la gente puede meter dinero o sacarlo si lo necesita. Le llaman “la caja abierta” así que cualquiera que vaya a Seva Café y lo necesite puede coger dinero de esa caja… También tiene una pequeña librería donde te puedes coger cualquier libro y llevártelo. A cambio si quieres puedes dejar algún libro que a ti te haya inspirado. Las noches en Seva son divertidas y es una sensación agradable sentir que sirves a los demás por el simple hecho de servir y ayudar. Me hace valorar a aquellos que sirven como medio de vida. ¿Cuantas veces vamos a comer fuera y cuando nos sirven ni siquiera miramos al camarero a la cara…? Yo creo que debemos tener un especial respeto por todo aquella persona que nos sirve. A mi personalmente me encanta el lema principal de Manav Sadhna “Love all, Serve all”.

Hicimos una nueva excursión a la parte antigua de la ciudad… llena de rincones indescriptibles… aquí os dejo con una pequeña muestra de la “vida” de sus calles…


El complejo maternal no tiene barreras.


...como sabeis las vacas en India son sagradas...


Cualquier callejon es sorprendente...

Os cuento ahora el instante mas emocionante que me he vivido desde que estoy en India… probablemente uno de los momentos mas impactantes de mi vida. Será difícil explicarlo pues se trata de algo que tocó directamente mi corazón y la mezcla de emociones fue tan grande que realmente necesitaríais experimentarlo personalmente para entenderlo... Os pediría que hicierais un esfuerzo por trasladaros a Ahmedabad conmigo 5 minutos…

Este domingo nos unimos una vez mas a grupo “By heart” para pintar en el convento de las Hermanas de la Caridad de Madre Teresa y pasar un rato con los enfermos. Decidimos dar un paseo y caminar hasta el convento porque a las 7:30 de la mañana todavía se puede disfrutar de lo poco que refresca la noche.

Pues bien, de camino al convento en el arcén de del carretera nos encontramos gente durmiendo… ¡familias enteras!. Entonces el llanto de un niño llamo nuestra atención y nos acercamos a una de ellas. Allí estaban los 6. La madre alimentaba a uno de sus bebés con un vaso de leche, mientras el otro lloraba esperando su ración. Su hermana de unos 6 años lo sostenía en brazos como podía y su hermano de unos 4 se acercó a nosotros curioso, sonriendo. El padre y la madre también nos miraban con curiosidad. Saqué la bolsa de piruletas que llevo siempre en la mochila y les di una a los dos hijos mayores. El bebe que la madre alimentaba empezó a llorar desconsolado y me acerque a él con otra piruleta. Miré a su madre a los ojos pidiendo su consentimiento y entonces acerque la piruleta a la boca de su bebe y el dulce del caramelo le corto el llanto. Su madre me sonrió y en ese momento el bebe me agarró el dedo gordo con su pequeña manita, aparto la piruleta con la otra mano se llevó mis nudillos a la boca. Por un instante se paró el mundo. Mientras se me saltaban las lágrimas sentía la injusticia de la situación, pero también la alegría de poder estar allí con los mas pobres de entre los pobres. Fue un momento realmente duro pero he de decir que hermoso a la vez, no os puedo explicar el por que… quizás ese bebé toco en lo mas profundo de mi corazón.

No tengo imágenes que mostraros de esta familia, pero si de las condiciones en las que vivían…


...esto es todo lo que tienen...

Bueno, con este instante mágico (para el que haya podido experimentarlo) me despido hasta dentro de unos días. Espero que os gusten las imágenes y que estas líneas os inspiren al menos una décima parte de lo que a mi me han transformado al vivirlas. No olvidéis contarme lo que se os venga a la cabeza… vuestros comentarios me animan a seguir escribiendo. Un abrazo enorme para todos.


Hasta pronto!

jueves, 17 de septiembre de 2009

losmejores maestros... los niños

Una vez mas gracias a todos los que estáis siguiendo conmigo este viaje. GRACIAS por vuestros comentarios, e-mails y vuestro apoyo.

Antes de empezar quiero darle las gracias Luci por encargarse de recolectar sandalias de la escuela infantil de Melbourne donde trabaja como voluntaria… Puedes estar segura de que ha merecido la pena.
Este chico es vecino mio, ahora juega con sus nuevas sandalias!

Los últimos días han trascurrido con regularidad, siguiendo un poco el horario que ya os contado. Vamos avanzando en nuestro trabajo con las escuelas, seguimos “sirviendo” a los niños, y nos vamos acostumbrando a algunas cosas (a otras es difícil acostumbrarse…)


Estuvimos visitando el centro historico... perros por doquier.

En lo referente a la parte arquitectónica ya hemos terminado el análisis de las 7 Anganwadis y hemos redactado un informe por cada una de ellas con las reparaciones que necesitan. También hemos empezado con el diseño de la nueva escuela infantil, la Bholu 8. Nuestra idea es diseñar una estrategia con la que abordar conceptualmente cada una de las futuras escuelas. Aspiramos a crear un grupo de conceptos para mejorar principalmente el rendimiento energético y la durabilidad de las futuras Anganwadis. Mediante simples técnicas de ventilación natural, protección solar y orientación podemos crear una metodología de diseño que sea energéticamente efectiva y económicamente posible. Poco a poco os iré contando como lo vamos a hacer, pero en esta entrada del blog me gustaría contaros otras tres cosillas que he aprendido esta semana. La primera ocurrió el sábado durante el encuentro con los “niños de la calle”. Como ya os conté todos los sábados se reúnen en Manav Sadhna entre 100 y 200 niños que vienen de la calle a pasar la tarde y a comer.

La primera parte de la tarde los voluntarios jugamos con ellos y en la segunda parte se hace un rato de meditación y se les sirve la cena (probablemente la única comida nutritiva del dia para muchos de ellos).

Pues bien, este sábado cuando yo llegue la primera parte ya habían empezado. Por grupos, los niños jugaban a diferentes juegos con los voluntarios. Unos jugaban juegos de balón, otros cantaban y bailaban, otros dibujaban o hacían manualidades… y la verdad es que no sabia como ayudar pues al parecer todos estaban ya haciendo algo (aparte el idioma me limita mucho).
Lo que me encontre cuando llegué.

Otra de las actividades.

...y aqui empezo todo... se dieron cuenta de que les hacia fotos...

Decidí entonces sacar mi cámara y simplemente pasar el tiempo haciéndoles fotos… y la magia ocurrió! Los niños empezaron a acercarse para que les hiciera fotos con sus amigos… al principio un par de ellos…luego unos diez…15…20… Pasaron entonces de querer hacerse fotos a querer hacerlas y se me formó una cola de mas de 30 niños para darle al botón y tomar una foto de sus amigos. De repente, yo ya tenía una actividad que ofrecer y los niños estaban entusiasmados con la cámara y con el hecho de verse después en la pantalla! Y entonces entendí que “siempre hay espacio para el que quiere ayudar”. Nosotros tenemos que poner la voluntad. Dios pone el resto.

He decidido que este pequeño taller de fotografía será mi actividad de cada sábado con los niños. Aquí os dejo con algunas de las fotos que tomaron (algunas sorprendentemente buenas).





De nuevo gracias a los niños he vuelto a aprender algo. Fue solo un rato después del taller de fotografía cuando llegó la hora de la comida. Primero los niños se sientan en el suelo y, mientras se les sirve, cantan una oración en Gujarati.

Mientras les servía me fijaba en sus caras de concentración… todos con los ojos cerrados (oliendo la comida) y sumidos en un autentico estado de meditación mientras cantaban. Algunos deben llevar días sin comer y sin embargo ninguno abría un ojo o dejaba de cantar mientras les llegaba el olor de la comida (algunos niños podían tener perfectamente 6 años).¡Ojala tuviera yo esa disciplina con el cultivo de mi espíritu! Me parece sorprendente que niños tan pequeños puedan tener ese nivel espiritual… ¿Cuantas veces nos paramos nosotros a dar gracias por todo lo que tenemos de esa forma?

Por último os cuento mi descubrimiento de una persona que ha hecho muchísimo por la sanidad en India, Harijan Sevak Sangh. ¿Como puede una persona ayudar tanto diseñando aseos ecológicos?

Especialmente en India el conocimiento sobre la higiene es muy bajo. La falta de infraestructuras de saneamiento provocó que hace unos años solo existieran aseos públicos. Para usarlos había normalmente que esperar largas colas y estaban realmente en malas condiciones higiénicas. Tampoco estaban conectados a ninguna red de saneamiento por lo que una serie de individuos llamados “los intocables” (normalmente de las castas mas bajas) se dedicaban a limpiar todos los residuos humanos. Su trabajo les excluía totalmente de la sociedad concentrándolos en pequeñas comunidades donde vivían aislados (aun quedan alguna de estas comunidades).

La idea de un aseo ecológico es que la materia orgánica se descomponga sin necesidad de estar conectada a ninguna red de saneamiento y sin que nadie tenga que limpiarla. Este hombre diseñó diferentes modelos que se usan en la actualidad y que han ayudado a reducir notablemente este grupo de personas marginadas, “the untouchables”. Al mismo tiempo creo el ESI (Environmental Sanitation Institute), en el que se imparten cursos sobre higiene reduciendo el numero de infecciones por esta causa.

Pues bien, normalmente diseñar aseos es lo primero que se el manda a un arquitecto cuando acaba la carrera y empieza a trabajar en un estudio. Es algo considerado casi como un castigo… sin embargo, he aprendido que haciendo algo tan “sencillo” como diseñar aseos se puede ayudar a muchísima gente. No es tan importante lo que hagas sino para qué o quién lo haces. Este hombre tenia un proyecto pensado para los demás. Esa es la diferencia. “Curiosamente” el hijo de este señor es el fundador de Manav Sadhna.

En la próxima entrada os enseñaré algunos de los modelos de aseos que se usan actualmente y que probablemente nosotros usaremos en la nueva escuela que estamos diseñando.

Espero que compartir todo esto con vosotros merezca la pena y que de alguna forma u otra nos haga reflexionar sobre lo mucho que tenemos que aprender de la gente humilde, de los niños, y de aquellos que trabajan para los demás. Yo hoy puedo decir que estoy
recibiendo mucho mas de lo que puedo dar.

mi nuevo amigo...
Muchísimas gracias por vuestro tiempo. No dudéis en contarme lo que os apetezca. Un abrazo a todos. ¡Hasta pronto!

jueves, 10 de septiembre de 2009

mi primera semana termina...

Muchisimas gracias a todos por vuestras palabras. Siento que vamos todos juntos...

Mañana se cumplirá una semana de mi llegada a la India y parece que llevo aquí meses. Son tantos nuevos conceptos que asimilar que el tiempo pasa despacio…y sin duda el calor no ayuda. Sin embargo mi valoración es muy positiva aunque cada nuevo descubrimiento sea mas duro que el anterior.

Los sábados en Manav Shadhna se convierten en el día de “los niños de la calle”. Todos los sábados a parte de los que diariamente vienen a la comunidad se unen entre 50 y 60 niños y niñas de la calle para jugar, comer y lavarse. La mayoría de estos niños han sido invitados numerosas veces a formar parte de la comunidad, pero por unas cosas o por otras no se unen. En muchos casos los padres les obligan a mendigar en la calle (con lo que ganan mas que haciendo tarjetas) y en otro son ellos lo que no se comprometen a venir asiduamente. Sin embargo el sábado están allí con todos los demás y al menos pasan un día agradable y se alimentan bien.

Estuvimos sirviéndoles la comida después de los juegos. Todos se sientan en el suelo muy ordenados y se les va sirviendo lo que ellos piden… y esto fue una de las cosas que mas me sorprendió. Son ellos los que deciden cuanto comen y sin embargo no desperdician ni una miga de pan ¡cuanto tenemos que aprender de ellos!. Aquí cualquier bien se valora al 100% (agua y comida principalmente) y se aprovecha al máximo. Cuando terminan, los niños lavan sus propios platos y se marchan (muchos tristemente a mendigar de nuevo) hasta el próximo sábado.




Cada bocado tiene su valor.



Hay un grupo que los fines de semana organizan actividades para ayudar a otras comunidades. El grupo se llama “By Heart” (“De corazón”). Este fin de semana la cosa ha ido de pintura. El sábado por la mañana (antes de atender a los niños) fuimos a pintar los aseos que el sábado anterior se habían construido en una comunidad de leprosos. Mas que otra cosa esta comunidad necesita la interacción con personas ya que estos barrios son casi prohibidos por miedo al contagio y prácticamente nadie los visita.

Pintamos varias horas, jugamos con los niños y habamos con los mayores (lo que pudimos pues la mayoría no hablan ingles). Al principio tenia un poco de miedo la verdad cuando los vi aparecer sin dedos y con heridas en la cara pero al final entiendes las necesidad que tienen de que se les mire sin miedo y entonces lo vences. La comunicación es mas mediante gestos y miradas, pero sus ojos no engañan cuando te dicen “gracias por venir”. El enfermo o el anciano estan muchas veces mas enfermos del corazón que de otra cosa. No olvidemos parar de nuestra vida diaria un momento para llamarles, visitarles y hacerles pasar un rato agradable. Yo creo que muchas de sus enfermedades las podemos curar nosotros.



Estan deseando jugar a lo que sea!!!


Uno de los aseos que pintamos.

El domingo fue también un día de pintura, pero esta vez fuimos a la casa de las Hermanas de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta. Cuando llegue me sentí un poco como en casa cuando vi en el balcón una estatua del corazón de Jesús con los brazos abiertos como dándonos la bienvenida. Es un edificio de tres plantas, con un gran patio y un muro que lo bordea. Pintar el muro era nuestro objetivo, aunque primero fuimos a ver a los mas de 150 hombres que allí viven atendidos por las hermanas. Son vagabundos o enfermos terminales sin familia a los que se les acoge hasta que mueren. Que gran labor comenzó la Madre Teresa… todos tenemos derecho a un final digno.


Mision cumplida!

Después de estos primeros días de adaptación (en todos los sentidos) hemos comenzado la semana concentrados en las Anganwadis. Nuestro primer objetivo es valorar la construcción de las escuelas ya construidas, económica y constructivamente. A partir de esta valoración reformaremos cada una de las Anganwadis y realizaremos un documento que recogerá los problemas mas comunes a evitar en futuros diseños. Nuestro segundo objetivo será diseñar la próxima escuela para la que ya tenemos un solar adjudicado.


Creedme, es alucinante caminar por las calles de un slum...y son felices!

Con una de las voluntarias india de la comunidad hemos visitado entre el lunes y el martes las 7 escuelas que han sido construidas en colaboración con AWF (Architects Without Frontiers). Ella nos ha servido de interprete para hablar con las profesoras y detectar los mayores problemas y necesidades de cada escuela. Ha sido un primer paso y estamos muy contentos con la investigación hasta el momento. El mayor problema que encontramos es la escasez de infraestructuras para el agua necesaria para los aseos y problemas de entrada de lluvia durante el monzón.




Nitaben nos ha ayudado mucho con el Gujarati...



Tuvimos tiempo tambien para jugar con ellos.

Hoy es martes 8 de Septiembre y es mi cumpleaños. Estoy verdaderamente feliz de pasarlo aquí haciendo algo que tanto alimenta mi espíritu. Esta mañana cuando hemos visitado las escuelas los niños me han cantado “Feliz cumpleaños” y les he repartido caramelos… ha sido genial!

Después mi amigo “Hesu” me ha sorprendido con un regalo increíble. Nos hemos dado una vuelta por la ciudad en elefante!!! Aquí los usan principalmente para transportar grandes cargas de alimento para las vacas y van por la ciudad mezclados con los coches, motos, bicicletas… es realmente impactante. Gracias Hesu!



Vaya experiencia!


Por la noche hemos ido a cenar al barrio antiguo de la ciudad con algunos de los voluntarios. La plaza donde hemos cenado se llena de vacas durante el día. La gente les lleva comida y alli se pasan todo el día hasta las 7. Después limpian la plaza y se convierte en un mercado y se llena de mesas para cenar aproximadamente hasta las 2 de la mañana. Se vuelve a recoger todo y la gente saca sus “camas” y se acuestan por toda la plaza… Es alucinante como todo se aprovecha al limite… no solo la comida y el agua, también el espacio. Al terminar paseamos por la zona y hemos encontrado una especie de comedor donde decenas de personas esperaban sentadas en la puerta. Uno de los voluntarios, Harry, nos explico que son indigentes que esperan a que alguien les pague la cena. Asi que como era mi cumpleaños los hice mis invitados de honor y los 31 que esperaban en la puerta entraron a comer. Pero lo mas sorprendente es que estamos hablando de 10 rupias por persona (aproximadamente 15 centimos de euro). ¡Me hizo muchisima ilusion tener la oportunidad de poder hacer algo asi!. La verdad es que lo he pasado muy bien. Ha sido un cumpleaños especial que recordare siempre.

Os aseguro que esta ciudad y su gente no dejan de sorprenderme. Donde normalmente desayunamos ya nos conocen y les hemos contado que hoy era mi cumpleaños. No nos han dejado pagar…solo nos conocemos de una semana! Y creedme, estas personas necesitan el dinero. Sin embargo donde menos tienen mas generosos son… a mi personalmente me han dado una lección de generosidad.

Por lo demás todo va bien por ahora. Sigo aprendiendo de los que me rodean, en especial de los mas pobres y me acuerdo mucho de vosotros. Especialmente a ti Luci, te echo muchísimo de menos.

Me despido hasta dentro de unos días. Espero que os gusten las fotos. Os quiero.

viernes, 4 de septiembre de 2009

el primer contacto con la realidad

Antes de empezar, muchísimas gracias por vuestros comentarios y e-mails de ánimo. Es para mi importante saber que estáis ahí.

Solo llevo dos días en India y tengo tantas cosas que contar que no se por donde empezar. Para no olvidar nada voy a tratar de escribir en orden cronológico.

Arquitectos Sin Fronteras organiza equipos de dos voluntarios y yo formo parte del equipo 1 junto con Jesús, gran amigo y compañero de carrera en Granada. Llegamos a Mumbai (antiguamente Bombai) por la noche hace dos días y partimos al dia siguiente para Ahmedabad. Pero antes de coger el avión tuvimos la oportunidad de recorrer un poco alguna de las calles de esta inmensa ciudad de mas de 30 millones habitantes. Fue solo un avance de lo que íbamos a encontrar un poco mas tarde en Ahmedabad. Una primera toma de contacto con In impactante en una ciudad sin reglas donde animales, personas, coches, motos y bicicletas…conviven y sobreviven día a día. Aquí os dejo algunas imágenes de nuestra ruta en taxi por la ciudad (mas de 4 horas de taxi, incluido el transporte al aeropuerto costó 700 rupias…unos 10 euros)


Los barrios de chabolas se mezclan con la natureleza y la ciudad.

El agua embotellada es un bien muy preciado.


Esa mujer esta buscando un sitio para orinar entre las piedras. Esa es su unica opcion.

Este probablemente era su hijo...


Mientras su madre me pedia dinero desde la ventana del taxi su hija me sonreia por la piruleta que le habia dado.

A la llegada al Ahmedabad esa misma noche nos esperaban los de la ONG (Manav Shadna) para llevarnos a nuestros “aposentos” durante las siguientes 6 semanas. Solo nos dio tiempo a preparar las mosquiteras (usadas para evitar al mosquito que porta la Malaria, que al parecer tiene turno de noche) y darnos nuestra primera ducha (con un cubo y un cacito como lo hicieron nuestros abuelos). Esta ONG lleva a cabo numerosos proyectos a parte de Anganwadi y hay aproximadamente unos 50 voluntarios.

A la mañana siguiente tuvimos “el Prathna” que son 15 minutos de oración diaria que se tienen antes de la reunión de la Organización. Al haber voluntarios de todas las religiones se hace una oración común que sirve para todos, y al terminar se discuten los asuntos mas importantes sobre cada proyecto.

Al ser nuestro primer día nos hicieron un rito de iniciación con música de timbales, y con ese punto de color que te ponen en la frente a modo de bendición. Y al terminar todo esto comenzó nuestro primera visita al interior de los barrios de chabolas (slums) donde trabajaremos. Allí visitamos las guarderías que ya se han construido y conocimos a las profesoras y los niños (no tengo fotos de esta parte porque por prudencia no he sacado la cámara… todavía). No puedo explicarlo con palabras, ni tan siquiera con una foto (que tan acostumbrados estamos a ver) podría explicar lo que se siente al caminar por los callejones de un “slum”. Sin embargo os puedo decir que es una sensación triste pero a la vez hermosa la de descubrir lo poco que en realidad se necesita para vivir. Cuando caminas te miran como a un extraterrestre, pero lo mas grande es que te sonríen. ¿cómo alguien en esas condiciones puede sonreir? ¡Quizás nosotros deberíamos sonreir mas!

Fuera de los slums las calles están llenas de gente celebrando la festividad de Rama Krishna, el dios representado por un humano con cabeza de elefante. El color asociado al elefante es rosa y por eso se embadurnan en colorante rosa y recorren las calles como en una especie de romería portando la estatua de Krishna. Es una locura, y una mezcla explosiva con el tráfico, las vacas, los camellos, y los perros que hay por la calle al mismo tiempo.



Comeremos a diario en la sede de la organización, el Gandi Ashram, situado a escasos metros de donde dormimos y donde se realizan muchas de las actividades y proyectos con los niños. Hoy ha sido nuestra primera comida. No hay sillas ni mesas todo ha sido sentados en el suelo y con la mano… picante?... se me saltaban las lágrimas…

El resto del día hemos estado tomando contacto con algunas de las personas que están envueltas en el proyecto y conociendo un poco los básico para sobrevivir en el área en la que vivimos. En los próximos días tendré un numero de teléfono móvil indio en el que me podréis localizar fácilmente. Lo escribiré en mi próxima visita al blog (para que me llames por mi cumple Bunbu, pero no te preocupes que yo te llamare un día antes para recordártelo).

Aquí me quedo por ahora, seguid escribiendo lo que se os ocurra y preguntad lo que queráis! Os dejo para despedirme con algunas de las imágenes que han hecho inolvidables e impactantes este primer encuentro con la otra realidad.


Las mosquiteras...


Despues del rito de iniciacion.


Los ninos de la calle trabajan haciendo tarjetas de felicitacion para ayudar a sus padres y atienden el colegio en la sede de la organizacion.


Creo que la felicidad se puede ver en mis ojos...


Esto fue lo que me encontre por la manana en el patio que linda con nuestra habitacion.

Como he tardado un poco en tener acceso a Internet me ha dado tiempo a volver a una de las guarderías del slum…estos son algunos de los protagonistas de esta segunda mañana en Ahmedabad.


En una de las Anganwadi...los ninos


Una anciana que cedio su casa para construir una de las Anganwadi. Estaba alli con los ninos.